El trastorno por atracón es un trastorno alimenticio grave. En muchas ocasiones, se confunde con la bulimia, pero veremos en qué se diferencia.
En el trastorno por atracón, encontramos que la dificultad en la alimentación es que comemos sin ningún tipo de control. Debido a este trastorno, construido sobre la ansiedad y la incapacidad de tener control, se llegan a ingerir grandes cantidades de comida, sin ser capaz de parar.
Este trastorno tiene grave consecuencias, entre las que podemos encontrar: enfermedades relacionadas con la obesidad, problemas respiratorios, problemas graves de ansiedad, problemas para trabajar funcionalmente…
A diferencia de lo que sucede en la bulimia, las personas con episodios de atracones no mantienen, después, actitudes para “compensar” lo que acaban de ingerir. Es decir, no hay episodios de ejercicio excesivo, uso de laxantes, vómito…